El Plan Maestro de Rescate Agropecuario destinará $637.5 millones para la recuperación integral de la caficultura salvadoreña: incremento de la producción, generación de empleos, dinamización económica, aporte al medio ambiente y desarrollo del país.
El Salvador llegó a producir anualmente volúmenes superiores a los 4 millones de quintales oro/uva entre los años 1980 y 1993. Con sus altos y bajos, el país cayó a volúmenes de hasta 700,025 quintales solo en la cosecha 2013-2014, todo ello por el poco apoyo, las inversiones sin enfoque integral, el mínimo respaldo del congreso y la falta de políticas públicas que respaldaran al sector ante la caída de los precios y la crisis por la roya.
Esta situación cambiará con el Plan Maestro de Rescate Agropecuario, liderado por el Ministro de Agricultura y Ganadería, David Martínez, que contempla como uno de los ejes principales el Rescate de la CaficulturaNacional, con una inversión de $637.5 millones destinada a dos principales pilares: la reingeniería de la deuda y la reinversión en la cadena del café.
“La reingeniería de la deuda no es igual a condonar los compromisos que ya existen con la banca. Para este proceso se hará una revisión de caso por caso, para evaluar el endeudamiento y refinanciamiento de cada productor y poder obtener un nuevo crédito, el cual será creado con características idóneas para el sector: tasas bajas, cuotas a largo plazo, períodos de gracia, etc.”, explicó la directora del Consejo Salvadoreño del Café, Lily Pacas.
La segunda gran apuesta se dirige a la reinversión en la cadena del café, desde la producción hasta la comercialización. “Anteriormente, los proyectos y programas se dirigían al financiamiento de la producción, al área agrícola, es decir, a la siembra y cosecha. Con el Plan Maestro vamos a potenciar a todos los actores de la cadena, vamos a apostar a los emprendimientos, a la compra de maquinaria, a mejorar los beneficios, a aprender sobre el arte del café”, amplió la funcionaria.
Actualmente se encuentran registrados 24,500 productores; 61 % hombres, 34 % mujeres y 5 % con personería jurídica. En cuanto al parque cafetalero, se reportan 200,000 manzanas distribuidas en las seis regiones cafetaleras: Alotepec-Metapán, Apaneca-Ilamatepec, Cacahuatique, Chichontepec, El Balsamo-Quezaltepequec y Tecapa-Chinameca.
Como parte de esta inversión, se renovarán 50,000 manzanas y se apostará por la producción de variedades con calidad de taza. “Una de las grandes ventajas del grano salvadoreño es que el 70 % del café se vende a precios diferenciados por la calidad de la taza; en ese sentido, el Plan no busca únicamente incrementar la producción, sino que pretende apostar a la producción de café de calidad. Se busca renovar el parque cafetalero con variedades resistentes, con alto nivel de productividad y con calidad de taza”, precisó Pacas.
En ese marco, la directora del Consejo Salvadoreño del Café indicó que se volverá indispensable el trabajo que se desarrollará en el Instituto Salvadoreño del Café, el cual se creará como parte del Plan Maestro. El esfuerzo de esta institución estará enfocado en la innovación, investigación y asistencia técnica.
El rescate sostenible y rentable para todos los actores de la cadena tendrá un efecto positivo en el medio ambiente, ya que los cafetales contribuyen en la reducción o eliminación de las emisiones de gases del efecto invernadero, evitan la erosión de la tierra y favorecen a las cuencas hidrográficas; además, esta inversión permitirá la generación de al menos 70,000 empleos directos en el sector cafetalero y más de 250,000 indirectos.
Cuando los fondos ya estén disponibles, se iniciará la investigación y el estudio de casos para evaluar la viabilidad y el tipo de acciones a tomar; cada productor y cada finca necesitarán un enfoque de acuerdo a las necesidades y a sus características. Si las fincas no son viables para la renovación, por ejemplo, se ofrecerá apoyo para la producción de otros cultivos.
La idea del Plan Maestro es que todas las tierras productivas sean rescatadas en búsqueda de la seguridad y la soberanía alimentaria, el mejoramiento del medio ambiente y la biodiversidad, la generación de empleos, el incremento de las exportaciones, la reducción de las migraciones y la dinamización de la economía.
MÁS INVERSIÓN EN CAFICULTURA
Recientemente, la nueva Asamblea Legislativa aprobó la ejecución de 45 millones de dólares, otorgados por el Banco Interamericano de Desarrollo(BID), para la renovación del parque cafetalero, el desarrollo de la investigación y el fortalecimiento técnico que favorezcan a la apuesta por una caficultura resiliente. Entre los logros más importantes que se buscan alcanzar con los $45 millones se destacan:
• Renovación del 33 % del parque cafetalero.
• Inversión en el Instituto Salvadoreño del Café.
• Promoción de la asociatividad del sector.
• Ampliación de los mercados para la comercialización.
• Aplicación y uso de tecnologías inteligentes para la adaptación al cambio climático.
Paralelo a todo este esfuerzo que contará con el respaldo de la nueva Asamblea Legislativa, el Consejo Salvadoreño del Café sigue avanzando en la creación y establecimiento de seis laboratorios de catación a nivel nacional. Esta iniciativa fortalecerá las acciones del Plan Maestro y garantizará los resultados favorables para la producción y comercialización, pues en estos laboratorios se determinarán las características del grano y los precios en los distintos mercados. Asimismo, se brindará acompañamiento técnico y, junto a la Escuela de Café de El Salvador, se ofrecerán oportunidades para el aprendizaje sobre la cadena del café.
➢ SIGUEN LAS BUENAS NOTICIAS
Esta semana el Ministerio y el Consejo presentaron la primera Política Nacional Cafetalera. En más de 30 años, el sector cafetalero no tuvo un instrumento así de completo y consultado, que permitirá trazar la ruta correcta para el rescate integral de la caficultura y para solidificar el respaldo a los productores cafetaleros de todo el país.
Adicionalmente, este Gobierno hará el lanzamiento de la marca Café de El Salvador, con esta importante estrategia se facilitará el posicionamiento de nuestro café de calidad en los mejores mercados del mundo y se reforzará el esfuerzo por promover el consumo nacional del café salvadoreño, entre otros propósitos fundamentales para el rescate de la caficultura.
