El sector ganadero es uno de los más resilientes en El Salvador, ejemplo de ello es el Rancho Los Panchos, en Chilanga, Morazán, donde trabajan desde las primeras horas del día para ordeñar, procesar y crear los lácteos que alimentan a buena parte de la población del oriente del país, y con mayor demanda en las festividades de fin de año e inicio de Año Nuevo.
Enrique Gutiérrez, tesorero de la Asociación Cooperativa de Ganaderos de Morazán (ACOPAGAM de R.L.) y de la cual forma parte el rancho, agradeció el interés y apoyo del Gobierno y del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), a través del Plan Maestro de Rescate Agropecuario y su Programa de Tecnificación y Desarrollo Ganadero.
La innovación y el trabajo caracteriza a Los Panchos, que cuenta con un hato de 60 cabezas, generando una producción de 2,000 botellas de leche al día. “Esta es una finca modelo, porque se cumple el proceso completo: produce buena leche, compra leche y elabora los lácteos, que distribuyen en tres puntos de venta en San Francisco Gotera”, explicó Gutiérrez.
Así, Los Panchos es uno de principales abastecedores de cuajada, queso, requesón, crema y quesillo de la zona oriental del país.
Por su parte, Juan Carlos Díaz, aclara que para tener buena leche se debe velar por la alimentación de las vacas (concentrado y pasto).
El ordeño también debe ser cuidadoso; actualmente se hacen dos, uno a las 5:00 a. m. y el otro a las 2:00 p. m.; cada ordeño cumple con los estándares de calidad, ya que la higiene es primordial tanto para el producto como para velar por la salud de los salvadoreños; la cual se vio amenazada en julio de 2021, cuando se detectaron lácteos contaminados con formalina provenientes de Nicaragua.
Ante el problema de contaminación en los productos lácteos importados, la actual administración del MAG reforzó los muestreos en fronteras; como el Ministro David Martínez sostiene: “La salud de los salvadoreños no está en juego”. Además, en reiteradas ocasiones ha explicado que ningún momento se están sobrepasando los acuerdos de los tratados comerciales, sino que simplemente se está haciendo cumplir las normativas.
De allí que, hace solo unas semanas, se inició el proyecto de modernización de las instalaciones en la frontera El Amatillo, La Unión, para realizar un mejor proceso de muestreos, mismos que se están haciendo en un mayor porcentaje que en años anteriores, velando por la seguridad sanitaria de la población y por romper con la competencia desleal del mercado nacional, el cual está siendo abastecido por los ganaderos salvadoreños, entre ellos los de ACOPAGAM, en Morazán.
Al igual que Rancho Los Panchos, son muchas las ganaderías salvadoreñas las que trabajan arduamente para llevar buena leche y productos lácteos de calidad a las mesas de la población.
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