La Navidad pasada un video se convirtió viral en las redes sociales, luego de que ciudadanos denunciaran el maltrato provocado por una mujer y otros familiares, en el municipio de San Martín al oriente de la capital, al detonar explosivos para torturar a su mascota.
En la grabación, que indignó a la sociedad salvadoreña, se observa a una mujer quemando cohetes durante la Noche Buena, mientras que un hombre sostenía a la fuerza a un perro; la pirotecnia detonaba a centímetros del animal, de tal manera que lo atormentaban.
Al conocer sobre la denuncia la Unidad de Bienestar Animal (UBA) del Ministerio de Agricultura activó el protocolo para la protección de la mascota, lo que llevó a la coordinación inmediata con la municipalidad de la zona, para castigar con la multa más alta a los maltratadores.
Los maltratadores fueron castigados con una sanción económica de $1,700, así como la prohibición para para la compra o tenencia de animales de compañía.
Gobierno buscará endurecer penas contra maltratadores
El caso, que generalizó el repudio contra los maltratadores de animales, abrió el debate sobre un nuevo marco legal, más severo contra de este tipo de personas.
El Ministro de Agricultura y Ganadería, David Martínez, agradeció el accionar de la alcaldía de San Martín, quienes actuaron de forma inmediata para garantizar el bienestar del animal; así como al jefe edilicio de la localidad, Mauricio Arias, quien dio apoyo al caso.
“Así deberían actuar todas las municipalidades junto a la UBA”, dijo el funcionario. Además, lamentó que el actual marco legal únicamente establezca sanciones económicas contra maltratadores de animales, pero advirtió que en los próximos días se estarían aprobando, por la Asamblea Legislativa, una nueva legislación más severa contra este tipo de acciones, que contempla la prisión como castigo por maltrato animal.
“Suerte tienen, aún es dinero la pena máxima. Estamos a días para que se apruebe la nueva ley donde estas acciones serán delitos”, dijo Martínez.
Ante este tipo de casos, el Gobierno y municipalidades tienen poca capacidad de acción, únicamente administrativas.
El caso de San Martín dejó al descubierto las pocas herramientas legales con las que se cuenta para la protección de nuestros animales, algo que indignó al Ministro Martínez, ya que los agresores intentaron engañar a los funcionarios municipales que acudieron a salvaguardar al perro.
“Para cobardes son el número uno. Resulta que el dueño de la casa mintió en todo lo que dijo”, advirtió Martínez, ya que los maltratadores intentaron evadir a la autoridad, así como intentaron esconder a la mascota, que fue localizada y puesta en resguardo por la diputada de Nuevas Ideas, Ivonne Hernández.
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