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MAG Y MESA TÉCNICA DEL CAFÉ RECOMIENDAN LAS BUENAS PRÁCTICAS PARA AUMENTAR LA PRODUCTIVIDAD
El Ministerio de Agricultura y Ganadería y la Mesa Técnica del Café recomiendan a los caficultores la implementación de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) para aumentar la productividad, conservar el medio ambiente y ser más resilientes ante los efectos climatológicos que podrían afectar la producción.
“Una de las Buenas Prácticas Agrícolas que podemos establecer y adoptar en las fincas cafetaleras es construir reservorios de agua, ya que eso permite hacer las aplicaciones foliares en la época seca, sobre todo en lugares donde es difícil el acceso al agua”, explicó Manuel Cabrera.
La técnico Deysi Figueroa describió que: “Una buena práctica para el cultivo del café es la elaboración de cajueleados y el establecimiento de barreras vivas, esto nos sirve para la retención de materia orgánica y evitar la erosión del suelo”.
Además, el registro de las lluvias permite un buen manejo de las plantas, aseguró Manuel Avilés. “Una Buena Práctica para el cultivo del café es llevar el registro de lluvias en sus fincas, esto permitirá al productor tomar decisiones oportunas para el momento de siembra de su cultivo y fertilización”, añadió el técnico.
Recomendaciones técnicas
Realizar monitoreos de lluvia en las fincas y anotar los mm de lluvia diario.
Implementar cosecha de agua y prácticas de conservación de suelo y agua: cajuelas y zanjas o fosas de infiltración, siembras en curva de nivel, entre otras.
Realizar podas de forma moderada en la sombra para proteger los cafetales en el período de canícula.
Realizar las siembras nuevas o renovación de cafetales, así como la siembra de árboles de sombra en los primeros meses del invierno (con un acumulado de lluvia mínimo de 100 mm a partir de la fecha de inicio oficial del invierno).
Realizar monitoreos constantes de roya en los cafetales y realizar el primer control preventivo de la roya con aplicaciones de fungicidas a los 45 días después de la floración principal (en caso de ser compatible el fungicida con el fertilizante foliar, puede hacerse una aplicación conjunta).
Realizar la primera fertilización foliar de 15 hasta 30 días después de la floración.
Realizar la segunda fertilización foliar a los 45 días después de la floración, de preferencia que incluyan aminoácidos.
Establecer trampas de broca en las fincas para iniciar los monitoreos y captura de hembras.
Realizar aplicaciones de materia orgánica al suelo en las siembras nuevas y cafetales establecidos (pulpa, compost, residuos de podas, etc.).
Utilizar cultivos de cobertura de suelos y uso de sombra temporal en la finca de café (por ejemplo, canavalia, crotalaria, higuerillo, gandul, tephrosia, etc., según las condiciones de cada finca).
Para el control de malezas se recomienda enfocarse, principalmente, en la plazuela de la planta y en el siguiente orden: control manual, control mecánico y de ser necesario control químico de forma moderada y selectiva (lugar, tiempo y cantidad adecuado).
La primera fertilización del suelo debe ser a partir de los 100 mm de lluvia acumulados, partiendo de la fecha de inicio oficial del invierno, en caso de ser posible utilizar fertilizantes de liberación lenta.
Instalar sistemas de riego en cafetales donde el recurso del productor o de la ubicación de la finca lo permita.
El MAG través de los especialistas en café trabaja junto a los caficultores para minimizar los impactos de los efectos climatológicos en las plantaciones de la renovación del parque cafetalero 2023 y en los demás cultivos del sector cafetalero.
